Fertilizantes orgánicos, órgano-minerales y enmiendas orgánicas
D. Rafael Gómez es Ingeniero Agrónomo y trabaja en fertilizantes desde hace casi treinta años, desarrollando sus funciones como Director Técnico en la empresa Fertinagro Nutrientes, fabricante de todo tipo de fertilizantes, orgánicos, organo-minerales, minerales, solubles, correctores, productos especiales, etc., asociada dentro de AEFA, en la que participa, especialmente dentro de la Comisión de Trabajo de Fertilizantes.
¿Qué entendemos por fertilizantes orgánicos?
Cuando se habla de fertilizantes orgánicos, hay que aclarar que en algunos países, se entiende por fertilizantes orgánicos, aquellos que pueden emplearse en agricultura ecológica de acuerdo con alguna norma internacional (europea, norteamericana, japonesa, etc.) y certificado por alguna empresa externa acreditada, mientras que un concepto más genérico es, tal como se ha definido recientemente en los grupos de trabajo de la Comisión Europea, fertilizantes cuyos nutrientes son contenidos en material orgánico, de origen animal, vegetal u otro origen orgánico natural constituido por compuestos/materiales, en los que los principales nutrientes están químicamente enlazados o forman parte de estas matrices orgánicas.
En la normativa chilena un fertilizante orgánico está definido como producto cuya función principal es aportar nutrientes para las plantas, los cuales proceden de materiales carbonados de origen animal o vegetal.
¿Por qué es importante el empleo de los fertilizantes orgánicos cuando en el mercado hay fertilizantes minerales de concentraciones más elevadas de nutrientes?
Los nutrientes de origen orgánico contenidos en los fertilizantes orgánicos, deben transformarse en el suelo gracias a los microorganismos en nutrientes minerales para poder ser asimilados por las plantas, y su incorporación a los cultivos es más paulatina y gradual que si proceden de abonos minerales, por lo que sería más lógico el empleo de éstos de mayores concentraciones de nutrientes.
Sin embargo, el verdadero interés de los fertilizantes orgánicos es la incorporación de materia orgánica, pues las extracciones de los cultivos con las cosechas y rastrojos y la meteorología con la mineralización, hacen disminuir los niveles de materia orgánica de los suelos, por lo que es necesario reponerla.
¿Puede explicar por qué es necesario reponer la materia orgánica de los suelos?
La materia orgánica forma complejos con los minerales de los suelos que tienen la capacidad de retener nutrientes y ponerlos a disposición de los cultivos, disminuyendo lixiviaciones y bloqueos, lo que favorece la asimilación de los nutrientes minerales. Es decir, la materia orgánica es sinónimo de fertilidad de los suelos.
Con materia orgánica además se mejoran las características físicas como porosidad, retención de agua, permeabilidad, etc. y se estimula la flora microbiana que a su vez facilita la transformación de los compuestos del suelo en nutrientes disponibles para los cultivos. En definitiva, con el uso intensivo de fertilizantes minerales se obtienen elevados rendimientos pero se salinizan paulatinamente los suelos, lo que lleva a un “cansancio” de los mismos con merma de las cosechas.
El aporte de materia orgánica favorece la asimilación de los nutrientes minerales y por tanto la eficiencia de la fertilización mineral. Puesto que la materia orgánica del suelo disminuye por las extracciones y la mineralización, es necesario reponerla mediante la incorporación de fertilizantes orgánicos.
También encontramos en el mercado enmiendas orgánicas ¿cuál es la diferencia?
Aportan asimismo materia orgánica, pero su función no es el aporte de nutrientes de origen orgánico como en los fertilizantes orgánicos, sino mejorar las propiedades físicas, químicas o biológicas del suelo. No precisan contener nutrientes minerales en cantidades significativas, pues lo importante es el aporte de materia orgánica.
Y los fertilizantes organo-minerales, ¿qué son?
Pues como indica su nombre, son combinación de materiales orgánicos y minerales, es decir, contienen materia orgánica y nutrientes minerales en el mismo producto.
Durante su fabricación se adicionan a los componentes orgánicos, abonos minerales, de tal manera que cuando se aportan al suelo, incorporan materia orgánica y nutrientes de origen mineral. Son un camino intermedio entre los fertilizantes orgánicos y los fertilizantes minerales.
Dependiendo de las materias primas que se usen, pueden emplearse para agricultura ecológica o no. La principal ventaja de estos fertilizantes es que con una sola aplicación se incorpora materia orgánica y nutrientes por lo que se favorece la asimilación de éstos. Pueden fabricarse en forma de granulado o pellet, pero también es posible disponer de formulaciones líquidas que permiten su aplicación mediante el sistema de riego.
Y hablando de líquidos, los ácidos húmicos y los aminoácidos ¿son abonos orgánicos?
Los ácidos húmicos son enmiendas orgánicas que contienen sustancias húmicas extraídas de leonarditas u otros materiales carbonados, mientras que los aminoácidos son abonos orgánicos nitrogenados obtenidos de proteínas animales o vegetales principalmente.